¿Qué hacen las emociones por nosotros?

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Te has preguntado alguna vez, ¿qué papel juegan las emociones en nuestras vidas? ¿Qué son? ¿Para qué sirven? Si sigues leyendo este post tendrás respuestas a estas preguntas

Las emociones son respuestas involuntarias de nuestro cuerpo en respuesta a un evento que ocurre en nuestro entorno o en el interior de nuestra propia mente. Dado que las emociones son involuntarias, y por lo tanto no podemos elegir en qué momento sentirlas, no se pueden considerar como buenas o malas. Más bien, podemos catalogarlas como agradables (alegría, calma, etc.) o desagradables (miedo, tristeza, etc.).

Por otra parte, no podemos decir que ninguna emoción sea peligrosa ya que nos han ayudado a lo largo de los siglos a sobrevivir. Por tanto, podemos decir que tienen una función adaptativa. Sin embargo, en algunas ocasiones, cuando se vuelven demasiado intensas, duran demasiado o ocurren en más ocasiones de lo que deberían, pueden ser un signo de alarma de que algo no va bien y debemos acudir a pedir ayuda profesional.

En los siguientes apartados vamos a repasar cada una de las emociones más comunes para poder entender qué función tienen en nuestras vidas:

Miedo

El miedo es la emoción que aparece tras una sensación de peligro. Esta emoción tiene una función importante en la supervivencia ya que nos protege de peligros potenciales y nos ayuda a reaccionar rápidamente ante estos. Por ejemplo, cuando cruzamos la calle y vemos como se acerca un coche rápidamente hacia nosotros, tendemos a correr hacia el otro lado de la acera para evitar que nos atropelle.

Enfado

Es la emoción que aparece cuando nos sentimos amenazados por otra persona. Esta tiene la función de defendernos ante las acciones de los demás y por otra parte, nos indica que las cosas no están saliendo como nos gustaría. Por ejemplo, cuando una persona nos falta al respeto, tendemos a enfadarnos y a expresar lo que nos ha molestado.

Tristeza

Esta emoción se desencadena cuando sufrimos pérdidas, tanto de personas, objetos, como un status o rol social. Esta emoción es importante para reducir nuestra actividad diaria para poder comenzar una especie de tiempo de “luto” y poder aceptar la pérdida. También ayuda a comunicar a la gente de nuestro alrededor que necesitamos su ayuda. Por ejemplo, cuando fallece un ser querido, pasamos por un período en el que tenemos pocas ganas de realizar actividades y nuestros seres queridos permanecen más atentos de nuestras necesidades.

Alegría

La alegría se desencadena cuando ocurren eventos agradables, cuando conseguimos objetivos o cuando disfrutamos de actividades que nos gustan. Esta emoción favorece las relaciones interpersonales y nos ayuda a liberar tensión. Por ejemplo, cuando estamos pasando un buen rato con la familia o amigos, afianzamos las relaciones y nos ayuda a descargar el estrés del día a día.

Como acabamos de ver, las emociones tienen un por qué y cumplen una función muy importante en nuestras vidas. A pesar de que algunas emociones puedan ser desagradables están ahí para ayudarnos y debemos agradecer que aparezcan cuando son necesarias. No obstante, si alguna emoción te está generando mucho sufrimiento o interfiere en tu vida a la hora de socializar, trabajar o realizar actividades, consulta con un profesional de la salud menta