Más de 70 profesionales de Atención Primaria y Atención Especializada del Departamento de Salud de la Ribera, se han reunido hoy en el Hospital de Alzira, con el fin de actualizar sus conocimientos sobre los cuidados continuados al paciente oncológico.

Lo han hecho en la II Jornada de Actualización en Oncología para Atención Primaria, que se ha celebrado en la doble modalidad de asistencia presencial y telemática y siguiendo las medidas de prevención necesarias.

El objetivo de esta Jornada, que ha sido inaugurada por la gerente del Departamento de Salud de la Ribera, Dra. Liliana Fuster, y los directores médicos Dr. José Manuel Soler y Dr. Juan Manuel Campos, ha sido el de formar a los asistentes en todos los aspectos que implica la atención y tratamiento del paciente oncológico y crear redes de información y apoyo mutuo entre los profesionales de los centros de salud y los especialistas hospitalarios.

Según ha destacado la Dra. Fuster, “la organización de este tipo de jornadas es necesaria si queremos crear sinergias entre niveles asistenciales que nos permitan optimizar la atención que prestamos al paciente oncológico, más teniendo en cuenta que la mayor esperanza de vida en la población y las altas tasas de supervivencia que se están alcanzando van a hacer que este tipo de paciente sea subsidiario de numerosos cuidados de salud en el futuro”.

Así, se trata de pacientes que deben ser atendidos y, según los casos, asistidos en los síntomas derivados del tumor y de la toxicidad de los tratamientos; se les debe ofrecer asistencia paliativa en la etapa final de la enfermedad, o se les debe solucionar los problemas específicos de salud que vayan surgiendo por su larga supervivencia.

“Esto solo puede hacerse con el concurso necesario de los profesionales de la Atención Primaria que son, además, los que mejor conocen al paciente y sus circunstancias familiares y los que más próximos están a él”, ha señalado la Dra. Fuster.

De esta forma, los asistentes a la Jornada han debatido sobre el papel de los diferentes métodos diagnósticos, como los marcadores tumorales, la utilización del PET (Tomografía por Emisión de Positrones) o el papel de la Anatomía Patológica, y se han familiarizado con aspectos como la vacunación, la nutrición o el ejercicio y el uso de técnicas de relajación en el cuidado del paciente oncológico.

También han podido ponerse al día de todos los aspectos relacionados con el cáncer ginecológico, el segundo en incidencia en mujeres y el tercero en mortalidad femenina. Y han abordado la importancia de crear cauces de comunicación fluidos entre los distintos profesionales que se ocupan del paciente oncológico, desde la detección de la enfermedad hasta la atención continuada de la misma.