El nuevo acelerador lineal del Hospital Universitario de la Ribera ha entrado en funcionamiento esta semana. Se trata de un equipo Truebeam, de última generación para el tratamiento oncológico con Radioterapia.

La incorporación de este nuevo equipo al Hospital de Alzira ha supuesto una inversión de 3,2 millones de euros por parte de la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública, que se han destinado tanto a su compra como a la adecuación del espacio donde ha quedado instalado.

Este equipo ha sustituido uno de los dos aceleradores lineales con que contaba el centro alcireño que, tras 19 años de funcionamiento, había quedado obsoleto.

Según ha destacado la gerente el Hospital de la Ribera, Dra. Liliana Fuster, “con la incorporación y puesta en marcha de este nuevo acelerador lineal mejoramos la dotación tecnológica de Hospital de Alzira, proporcionándole los más avanzados instrumentos en el campo del diagnóstico y tratamiento”.

En este sentido, “el Hospital de la Ribera también cuenta, desde el pasado mes de enero, con un equipo de PET-TC, el primero de estas características en sus 21 años de funcionamiento y, en breve, comenzará a instalar una nueva Resonancia Magnética, que sustituirá una de las dos actuales con que cuenta el centro hospitalario”, ha afirmado Fuster.

 700 pacientes al año

Unos 700 pacientes al año se beneficiarán del nuevo acelerador lineal, que permite tratar todo tipo de cánceres primarios y metastásicos. Así, su alta precisión permitirá destruir las células cancerosas, minimizando, a la vez, los efectos en los tejidos circundantes sanos del paciente y mejorando, con ello, el resultado clínico de los tratamientos.

Del mismo modo, el nuevo equipo reduce el número de sesiones necesarias para un gran número de tratamientos, agilizando a su vez los tiempos de respuesta.

Otro de los beneficios de esta nueva tecnología es que las sesiones de tratamiento de determinadas patologías pueden ver reducida notablemente su duración, al pasar de 20 minutos a tan sólo 3 minutos, lo que minimiza el estrés que cada sesión genera en el paciente.

Asimismo, el equipo lleva incorporado un sistema de imagen por Rayos X integrado que permite conocer la posición exacta del tumor para, así, delimitar los haces de radiación con mayor exactitud. Si el paciente se mueve voluntaria o involuntariamente, el médico y técnico lo detectan y ajustan el haz de radiación, una característica que contribuye, aún más, a la efectividad, precisión, seguridad y rapidez de los tratamientos.

Además de las terapias oncológicas, el nuevo acelerador lineal también puede emplearse para tratamientos de tumores no malignos inaccesibles a la cirugía por su localización o comorbilidad del paciente, mediante técnicas de radiocirugía o estereotaxia.