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Mi hijo tiene tos. ¿Qué hago?

Mi hijo tiene tos. ¿Qué hago?

Estamos en pleno invierno, estación en la que la tos infantil es un sonido muy habitual en los hogares. Cuando el que tose es tu bebé o tu pequeño puede que te sientas más intranquila/o. Sin embargo, es importante que recuerdes que la tos infantil no suele corresponderse con una enfermedad grave.

Se trata de un mecanismo de defensa de nuestro organismo, y suele estar desencadenada por irritación o inflamación de la vía aérea, aunque también por la presencia de un cuerpo extraño.

La tos infantil es un motivo frecuente de consulta en Pediatría, tanto en atención primaria como en urgencias hospitalarias. Puede ser molesta, duradera y afectar a la vida diaria de los niños y de las familias. Y aunque muy pocas veces, indica un problema de salud grave, es conveniente que tengas claro algunos conceptos.

Tipos de tos

Es importante que sepas identificar los diferentes tipos de tos, sobre todo para saber cuándo acudir al pediatra. Algunos de los más importantes son:

  1. Tos seca: no acompañada de secreciones (mucosidad). Puede tener diferentes orígenes: síntoma de inicio de un catarro común, síntoma de broncoespasmo agudo (normalmente se acompañará de ruidos respiratorios tipo pitos y/o dificultad respiratoria) o síntoma de aspiración de un cuerpo extraño (juguete pequeño, fruto seco…), sobre todo si aparece de forma brusca y es persistente.
  2. Tos productiva: se acompaña de secreciones (mucosidad), y sirve como mecanismo de expulsión de las mismas. Suele ser de corta duración (menos de 3 semanas) y aparecer como síntoma de los catarros comunes. Sin complicaciones.
  3. Tos perruna: típica de las laringitis agudas, cuando la infección vírica afecta a la laringe. Suele acompañarse de voz ronca o afonía y, en ocasiones, de un sonido característico con la inspiración, el llamado estridor.

¿No se puede hacer nada? Todo depende del origen de la tos.

Si se trata de una tos por broncoespasmo o bronquitis aguda se tratará con los fármacos adecuados para ello.

Sin embargo, si el origen de la tos es una infección vírica que está provocando un catarro común…la cosa cambia.  Los antitusígenos y otros medicamentos empleados para “tratar” la tos no han demostrado ser eficaces, y además, no están exentos de efectos adversos.

Como norma general, no suele pautarse medicación con el objetivo de cortar la tos

Además, recordemos que la tos es un mecanismo de defensa del organismo. Por ello, y como norma general, no suele pautarse medicación con el objetivo de cortar la tos. Lo que hay que tratar es la causa, cuando es posible.

Eso sí, existen una serie de medidas inocuas que pueden ayudar a mejorar este síntoma: mantener al niño correctamente hidratado, favorecer la humedad ambiental (para evitar un ambiente demasiado seco) y evitar que sean fumadores pasivos.

Para la tos nocturna, puede ir bien que duerme un poco incorporado (levantar un poco la cabecera de la cama o ponerlo semisentado).

Ya te ha quedado claro que la mayoría de las veces la tos no es preocupante. Entonces…

¿Cuándo consultamos al pediatra?

Ante todo, SENTIDO COMÚN. Desde esta premisa, es recomendable que como madre o padre tangas claro cuando acudir al pediatra.

  • Si sospecha de aspiración de cuerpo extraño.
  • Si se acompaña de dificultad para respirar (el niño respira más deprisa de lo habitual, lo encuentras fatigado, se le marcan las costillas o el esternón cuando respira).
  • Si se acompaña de afectación importante del estado general del niño (decaimiento, rechazo de la ingesta).
  • Si aparece un cambio de coloración a color azulado de cara, labios o lengua con la tos.
  • Si escucha un estridor (sonido anormal y chillón) inspiratorio (al coger aire), especialmente si va acompañado de fatiga.
  • Si escucha pitos cuando el niño espira (al expulsar aire) y no conoce pautas de manejo del asma en casa.
  • Si aparece en niños muy pequeños, sobre todo en los meses de noviembre a marzo.
  • Si la tos dura más de 3 semanas e interfiere en las actividades habituales del niño. Es decir, cuando se convierte en tos persistente.

Espero que se haya cumplido el objetivo de este artículo que no es otro que conozcas una información si tu pequeño tiene fiebre. Si sigues teniendo dudas, puedes mandarnos tus comentarios.

 

Irene Hernández León

Residente de Pediatría del Hospital Universitario de La Ribera