En las últimas semanas estamos asistiendo atónitos a cambios bruscos del clima; tormentas y días lluviosos con días soleados y altas temperaturas. Fenómenos propios de la primavera en la que estamos pero ciertamente agravados, según la comunidad científica, por el cambio climático y el calentamiento global.

Unas condiciones que afectan directamente a nuestra salud y que en el futuro lo podrían hacer en mayor medida si nos fijamos en las previsiones del cambio climático.

Hemos pensado que te vendría bien que te recodáramos en esta sección “Medio Ambiente Saludable” del blog, algunos consejos de salud para afrontar mejor esta situación.

Problemas de salud como la alergia y los resfriados son frecuentes en este periodo, pero no son los únicos. Las condiciones ambientales de la primavera también pueden afectar a la piel e incluso al estado de ánimo.

Astenia primaveral

La astenia primaveral supone una dificultad de adaptación a los cambios meteorológicos  y ambientales como el incremento muy importante de las horas de luz, de calor y de otros factores.

Síntomas:

  • Cansancio intenso
  • Dolores musculares
  • Tristeza
  • Falta de apetito
  • Pérdida de peso
  • Cambios en el ritmo intestinal

Según los expertos, la astenia suele ir remitiendo poco a poco

Consejos:

Realizar ejercicio regularmente, hacer actividades al aire libre y dedicar tiempo a la relajación, pueden actuar como medida preventiva.

Resfriados

La gran amplitud térmica durante la noche y los cambios bruscos de temperatura pueden facilitar resfriados o constipados. En primavera, la atmósfera realiza una transición del invierno al verano, por lo que España se ve constantemente afectada por masas de aire muy distintas frías/cálidas con cambios bruscos.

Del mismo modo, fenómenos como las tormentas, que provocan cambios en 3 variables distintas como la bajada repentina de temperatura, el aumento brusco de la humedad relativa y el descenso de la presión atmosférica puede provocar que nuestro cuerpo pueda resentirse ante un cambio repentino de las condiciones.

Los consejos para prevenir el resfriado pasan por seguir un estilo de vida saludable que favorezca el sistema inmunitario:

  • Mejorar la calidad del sueño
  • Hacer ejercicio frecuentemente
  • Reducir los niveles de estrés
  • Exponerse a la luz solar para favorecer la síntesis de vitamina D
  • Dieta rica en vitamina C y zinc

Alergia

La primavera trae consigo diminutas partículas de polen que generan síntomas en aproximadamente 8 millones de alérgicos en España, según datos de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC).

En los momentos previos a las tormentas primaverales, las condiciones meteorológicas, de bajas presiones y viento, favorecen un mayor movimiento de los pólenes en el ambiente lo que aumenta los índices polínicos por lo que la alergia puede ser más intensa.

Síntomas:

  • conjuntivitis
  • rinitis
  • sinusitis
  • asma

Consejos:

Además de seguir el tratamiento prescrito por el médico, es aconsejable purificar el aire del hogar y mantener las ventanas cerradas, sobre todo, de cinco a diez de la mañana y de siete a diez de la noche, que es cuando el polen está más activo.

Problemas en la piel

Con la llegada del buen tiempo, los hongos y las bacterias amplían su foco de actuación. Además, el incremento de la exposición solar y la sequedad que arrastra la epidermis por los meses de frío hace que se requieran medidas especiales para el cuidado de la piel.

Síntomas

  • Alergias
  • Sequedad

Consejos

  • Uso protector solar
  • Utilizar ropa de tejidos naturales como el algodón
  • Secarse bien después de la ducha

Infecciones gastrointestinales

Las diarreas y la salmonelosis son otras de las afecciones de origen bacteriano que proliferan en el equinoccio primaveral. Esto se debe, principalmente, al aumento de las temperaturas y de la humedad que contribuyen a la propagación de bacterias en alimentos mal conservados

Consejos

Presta especial atención al estado de los alimentos que se ingieren y elige aquellos que ayuden a depurar el organismo

Esperamos que te hayan sido útiles estos consejos y que haya quedado claro la incidencia de las condiciones meteorológicas y climáticas de la primavera y por añadido del cambio climático en nuestra salud.

Sobre las consecuencias del deterioro ambiental y el cambio climático en nuestra salud ya hablamos en profundidad en un reciente post en Viure Amb Salut. Un tema sobre el que volveremos desde otras perspectivas. Mándanos tus comentarios en nuestras redes sociales

Teresa Arnau Responsable de Medio Ambiente del Departamento de Salud de La Ribera